sábado, 2 de mayo de 2009

Un puente de desconexión.....



Otras veces he aprovechado los días festivos, los puentes y cosas así para viajar, aprovechando los horarios laborales festivos que te permiten escaquearte del mundo e irte a otra parte, solía pasar, que allá donde ibas, todo el mundo hacía lo mismo que tú, el turismo del puente. Los restaurantes estaban siempre llenos (los buenos), las calles con sus típicos sitios que no había que dejarse sin ver, atestados, haciendo siempre cola la gente para la foto del lugar emblemático, y así iba todo. Pero de un tiempo a esta parte, mis viajes son preferiblemente a contrareloj, cuando no va nadie a esos sitios, allí prefiero estar yo, poder entrar a un museo sin la marea de las prisas, el agobio del no llego, y dejarme llevar por la intuición a descubrir calles y plazas ni si quiera señaladas en las guías turísticas. Este puente me he decidido por la playa, las aguas del Mar Menor, y las del Mar Mayor, tenemos unos espacios naturales magníficos, en los que la brisa nos mece con su paseo diario. La Manga es una zona preciosa, si se saben buscar los rincones adecuados, sobre todo para el descanso. En breve llegará el calor, y será la tarde la que me vea sumergirme como sirena, en sus fondos, hasta que la noche me llama con sus luces intermitentes, que es la hora de volver a casa, de entrar en la orilla y secarme con la toalla, poner mis pies en tierra, y sentarme en la terraza a dejarme llevar por el paisaje infinito de este mar.

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