miércoles, 14 de abril de 2010

LLoviznando...

Desde ayer el cielo se cubre con un gris perlado, tímidas gotas van apareciendo al paso, la calle se vuelve perezosa, el sol duerme perdido. Las salas de espera de los consultorios médicos son una puesta en escena curiosa, llevamos analíticas, radiografías, y todo un historial de me pasa esto o aquello. Frente a mí habían tres mujeres, la del centro embarazada de dos niños, las que flanqueaban los laterales buscaban quedarse en estado. Entra la que espera los bebés, y se queja una de las que queda de lo que se retrasa el médico, la otra dice que es su primera vez en dicha consulta. Yo les digo que bueno, que hay que ir sin prisas. Me duele la espalda, será el tiempo, no lo sé. He de publicar muchas fotos que tengo danto tumbos en carpetas de ordenador, hay que darles vida.

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