"La Colegiala", y Manuel Baños...

Siempre me ha gustado el pan de estas panaderías, siempre en su punto, un pan apetecible. Me decanto por los que llevan zanahoria, los integrales, los salteadores( que es una masa entre dulce y salada), las bolitas rellenas de chorizo, las empanadillas de espinacas... En fin, por todos sus productos desde que abrieron al público. El pasado fin de semana, nos enteramos de la triste noticia de la desaparición del dueño de las panaderías, repartidas por toda Murcia, en un accidente aéreo. Sobrevolaba con un ultraligero y acabó en el mar. Como hablo de cocina, creía que debía de hablaros de él. Para los que no los sepan, desde hace un tiempo las panaderías son o buenas o malas, están las de barrio, las de toda la vida, que con fidelidad te dan un pan en condiciones, y luego están esas barras de pan que a la tarde de haberlas comprado parecían chicles pastosos. Empezaron a surgir estas panaderías de "La Colegiala", tratando de llevar eso que se había perdido de nuevo a las casas, un pan en condiciones, y de calidad. Probé no hace mucho, uno que es a la leña, y sale buenísimo. Así que cosas de la vida, este pobre hombre que a los 60 años queriendo divisar desde el cielo, una de sus últimas aperturas en Santa Pola, termina por irse a los cielos para ver ya no sólo, la de Santa Pola, sino todas las repartidas por su Murcia Natal. Un abrazo a la familia, y lo mejor que podeis hacer es seguir trabajando con el mismo estilazo que lo hizo él, Don Manuel Baños Garre.