Paseando por el Valle

Con un domingo resplandeciente, la mañana debía de tomar su camino fuera de casa. Los domingos soleados en Murcia, invitan a fundirse con el paisaje que nos rodea. Al no disponer de demasiado tiempo, el recorrido por el que hemos optado en esta mañana, ha sido acercarnos al Valle Perdido y a la Cresta del Gallo. Los niños agraden, y mucho, estos paseos con olor a romero, pasear bajo la pinada y sentarse en medio del monte, a escuchar sonidos naturales. Cuando llegas, descubres mucha gente paseando, con sus ropajes preparados para el camino. De repente, en dirección contraria a la nuestra, dos señoras llevan en la mano una seta, y me pregunto, será comestible, dónde la habrán encontrado. Seguimos caminando, y decidimos ver una camino paralelo, al poco tiempo, una cantidad de setas nos reciben al paso, y nos preguntamos, serán comestibles. He decidido para la próxima salida, ir preparada, no sin antes haber consultado con algún experto que me pueda informar, a ser posible de la Universidad de Murcia. La vuelta a casa trae consigo la sensación de haber aprovechado el tiempo, y de no haber dejado una mañana preciosa como la de hoy, perdida frente al televisor u otros menesteres menos productivos.